El precio del petróleo intermedio de Texas (WTI) cerró este jueves con una caída del 4.9%, a US$72.9 el barril, arrastrado por las dudas sobre la demanda energética en los próximos meses.
Al cierre de las operaciones en la Bolsa Mercantil de Nueva York (Nymex), los contratos de futuros de WTI para entrega en diciembre restaron US$3.76 con respecto al día anterior.
El mercado reaccionó a los últimos datos de las reservas comerciales en EE.UU., que arrojaron un gran incremento semanal, y de la producción industrial, que cayó en octubre debido a la huelga en el sector del automóvil.
La Administración de Información Energética (AIE) informó el miércoles que las reservas de crudo aumentaron en 3.6 millones la semana pasada, hasta 421.9 millones, mucho más de lo esperado, y este jueves, la Reserva Federal indicó que la producción industrial bajó un 0.6% en octubre.
El analista Craig Erlam, de la firma Oanda, señaló hoy en una nota que hay “preocupaciones claras por la demanda de cara al año que viene, particularmente en lo que respecta a China”.
No obstante, algunos expertos consideran que detrás de los descensos recientes puede haber fondos especulativos que están apostando por la caída de los futuros del crudo, como indicó Phil Flynn, de Price Futures Group, a CNBC.
La Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) precisamente señaló el lunes pasado en su informe mensual que los fundamentos del mercado son fuertes, “pero los precios del crudo han bajado en las última semanas, principalmente por especuladores del mercado financiero”.