WASHINGTON.- El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha defendido el acuerdo que su equipo está negociando con el Senado sobre la crisis fronteriza del sur del país, asegurando que «sería el conjunto de reformas más duras y justas».
«Durante demasiado tiempo, todos sabemos que se ha roto la frontera» y «ya es hora de arreglarlo», ha asegurado el presidente en un comunicado compartido por la Casa Blanca en el que ha añadido: «Es por eso que, hace dos meses, ordené a mi equipo que iniciara negociaciones con un grupo bipartidista de senadores para abordar seria y finalmente la crisis fronteriza. Desde hace semanas eso es lo que han hecho. Trabajando las 24 horas del día, durante los días festivos y los fines de semana».
«Seamos claros. Lo que se ha negociado sería –si se convierte en ley– el conjunto de reformas más duras y justas para asegurar la frontera que jamás hayamos tenido en nuestro país», ha sentenciado.
Este nuevo plan daría al presidente una «nueva autoridad de emergencia» para cerrar la frontera en el momento en el que se vea abrumada y Biden ya ha asegurado que, en el momento en el que tuviera esa autoridad, la pondría en práctica.
«Además, el Congreso necesita finalmente proporcionar los fondos que solicité en octubre para asegurar la frontera. Esto incluye 1.300 agentes de patrulla fronteriza adicionales, 375 jueces de inmigración, 1.600 oficiales de asilo y más de 100 máquinas de inspección de última generación para ayudar a detectar y detener el fentanilo en nuestra frontera suroeste», ha agregado.
Para Biden, «asegurar la frontera a través de estas negociaciones supone una victoria para Estados Unidos». «Para todos los que exigen un control fronterizo más estricto, esta es la manera de hacerlo», ha aseverado y ha cerrado el comunicado dirigiéndose directamente a los senadores para decirles que, «si se toman en serio la crisis fronteriza, aprueben un proyecto de ley bipartidista» y lo firmará.