SEATTLE – No es exagerado decir que los sueños de postemporada de los Yankees pendían de un hilo mientras Juan Soto se tomaba unos segundos adicionales en la pista de seguridad la tarde del jueves, tras deslizarse fuertemente contra la pared al realizar una deslumbrante atrapada en zona de foul en el séptimo inning.
Casi todos los miembros de la defensiva de los Yankees se agruparon alrededor de la superestrella dominicana, esperando que se levantara. Soto se incorporó con precaución, flexionando su rodilla izquierda, y luego le dijo al manager Aaron Boone que podía continuar en el juego. A una distancia, se podía sentir cómo toda una ciudad exhalaba con cautela, a pesar de la derrota de los Yankees por 3-2 ante los Marineros en el T-Mobile Park.
“En ese momento, literalmente solo pensaba en mi salud”, dijo Soto. “Sé que todos quieren que esté saludable en los playoffs. Definitivamente, estaba pensando en mi salud más que en cualquier otra cosa. … Es un moretón, porque me golpeé contra la pared. Literalmente, directo contra el concreto. Definitivamente se siente mejor [después de recibir tratamiento].”
Boone y el trainer Tim Lentych fueron algunos de los que consultaron con Soto, quien recibió vítores del público al permanecer en el juego. Dentro de los muros del clubhouse, también había una celebración cautelosa, comentó el derecho Clarke Schmidt.




